La Federación Nacional de Libre Pensamiento ha sido informada por los librepensadores, humanistas y activistas del secularismo en Quebec del Proyecto de Ley 21 sobre el secularismo en esta provincia del Canadá.

Para emitir una opinión razonada conviene partir del hecho de que Quebec es un Estado que forma parte de la Confederación Canadiense, que es una monarquía constitucional, cuyo soberano es además jefe de la Iglesia anglicana. Aunque en el Canadá no existe una religión de Estado, no es una república y la separación de las religiones y del Estado sólo existe en la jurisprudencia y no en una ley.

En consecuencia, una analogía estricta con la situación francesa sería inoportuna. Cualquier paso adelante hacia el secularismo de la Escuela y del Estado debe ser apoyado vigorosamente. En este asunto, como en muchos otros, no puede haber un “imperialismo” cultural por parte de Francia.

El proyecto de ley comienza con esta declaración:

  1. El estado de Quebec es laico.
  1. La secularidad del estado se basa en los siguientes principios:
  • La separación del estado y las religiones.
  • La neutralidad religiosa del Estado.
  • La igualdad de todos los ciudadanos.
  • -Libertad de conciencia y libertad de religión.

¿Quién podría estar en desacuerdo con esos principios?

Las historias de la laicidad en Francia y Quebec son naturalmente diferentes, y no se pueden aplicar mecánicamente las mismas disposiciones de un país a otro, pero lo esencial del proyecto de ley 21 es un instrumento poderoso para instaurar y desarrollar la laicidad en Quebec.

Se prevé que la ley que regula los «ajustes razonables» será modificada por la siguiente disposición: «La presente ley impone, en la medida prevista en ella, un deber de neutralidad religiosa en el ejercicio de sus funciones a los miembros del personal de los organismos públicos, de conformidad con las exigencias de la laicidad del Estado. »

Si bien es problemático que la ley prevea la coexistencia de prohibiciones y autorizaciones de símbolos religiosos para el personal de los organismos públicos en función de las situaciones ante, no es menos cierto que la dinámica que se va a poner en marcha, si se aprueba esta ley, resolverá sin duda en el futuro esta contradicción.

Daniel Baril, ex Presidente del Movimiento Laico del Quebec y miembro del Consejo Internacional de la Asociación Internacional del Libre Pensamiento, detalla con precisión el contenido de esta ley en la Razón (revista del Libre Pensamiento) de junio de 2019. Te invitamos a que la consigas cuando salga.

¡La laicidad es el futuro de los pueblos!

¡La Separación de las Iglesias y del estado es el instrumento!

Paris, Montréal, 25 de avril 2019